El uso del acceso vascular juega un papel importante en la recuperación del paciente, especialmente en los casos más graves. En los servicios de salud, la terapia de infusión se considera el procedimiento más común.
Estudios globales recientes muestran que alrededor del 60% de los pacientes tratados en instituciones de salud reciben terapia de infusión de forma periférica y/o central.
De esta manera, los profesionales con título de especialista ganan un diferencial en el mercado laboral y garantizan una excelente atención a sus pacientes, basada en los procedimientos y protocolos institucionales más adecuados para minimizar los riesgos para la salud.
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